Posts

Showing posts from October, 2010

Laberíntico

Image
No sé si es la vida quien me lleva hacia ti o tú quien se acerca, y aunque intento no darle importancia, vuelves a aparecer frente a mí, como una señal que soy incapaz de entender, una serie de significados que han ido tejiéndose a tu piel para conformar esa imagen tan familiar que resuena en mis recuerdos, pero suficientemente difusa como para no reconocerte. Lo peor no es fallar en saber quién fuiste, sino verte dar pasos hacia atrás cuando yo los doy hacia adelante, o notar que vacilas cuando no hay paso alguno. Es por eso que hasta que no consiga descifrarte o yo mismo crear una imagen en tus pensamientos, me contentaré con llegar a la mitad del camino, donde tal vez la vida ya te haya llevado a ti. La vida y sus inexplicables métodos.

Peor que los cigarrillos

Image
Antes de salir de casa te cercioraste de tener los mil dolares en el bolsillo, aún sin saber para qué diablos te los había dado tu padre. Como todas las madrugadas, ibas de camino al paradero donde subirías al carro de siempre, dormirías la hora entera de viaje y pasarías cerca de ocho horas sentado detrás de un escritorio leyendo y firmando papeles en blanco. Pero un golpe en la cabeza hizo de esta madrugada algo totalmente distinto. Cuando abriste los ojos notaste que estabas sentado detrás de un escritorio, pero en lugar de papeles había cuchillos, pinzas, sierras y herramientas que nunca habías visto en tu vida, todas brillando bajo la única lámpara del pequeño cuarto. Intentaste moverte, pero al instante notaste las cuerdas que te mantenían sujeto a la silla, así como la mordaza que cubría tu boca, y pronto una voz que provino de algún lugar de la habitación te hizo olvidar por completo lo anterior. Luego de adaptarte un poco a la iluminación, conseguiste ver a quien hablaba, un

Atrás no hay nadie

Image
Nos tropezamos un lunes como hoy, hace siete días, te vi y por unos instantes no supe qué pensar de ti. Estabas sentada frente a mí dos meses atrás, hablando del amor y de la muerte mientras comíamos alfajores. Un año antes paseábamos por las tiendas de una galería y pedías que te grite como si estuviese enojado contigo, pero yo no quise. Varios días anteriores a eso regresabas de un viaje al extranjero y traías una maleta a pesar de haberte marchado con dos; decías que parte de ti se había quedado en el camino, que era mejor así. Hace cuatro años te hablé por primera vez, ya no sé ni cómo me atreví, y terminamos yendo al cine a ver una mala película. Estabas frente a mí cinco años atrás, no te había visto antes, no sabía quién eras o por qué mis amigos te conocían; sólo sé que ese fue el peor día de mi vida. Nos tropezamos un lunes como hoy, y desde entonces no te he vuelto a ver. Un vistazo al pasado ayuda a aclarar el presente.